Oh! Dem Watermelon
Watermelon
Watermelon
Oh! Dem Watermelon
Oh! Dem Watermelon
Oh! Dem Watermelon
Oh!!! Watermelon
Watermelon
Watermelon
Está pegajosa la rola, no? No se enojen conmigo si después de un día todavía la traen en la cabeza.
Oh! Dem Watermelons (1965) de Robert Nelson y su cine experimental provienen de San Francisco, California.
Estudió para ser pintor, pero como muchas veces sucede, sin pensarlo, se convirtió en cineasta a mediados de los sesentas. En 1967, sus cortometrajes estuvieron entre los más difundidos en el underground de los yunates estates. Casi en todos sus cortos podemos esperar algo con sentido del humor y, aunque pareciera no hacer referencia a nada, a veces sí lo es.
En este caso, el corto Oh Dem Watermelons parodia el racismo. Es necesario comentar que a pesar de ser 10 minutos y algo de cortometraje, en un punto sustantivo parece que ha pasado más tiempo de lo esperado. Llega a emocionar de tal forma en la que te levantas y sales de la sala, o te quedas hasta el final.
Si nos ponemos a pensar los primeros dos minutos (aunque realmente no hay mucho qué pensar, más que en la inmortalidad de la sandía) en qué hacemos viendo a esta sadía reposando en el césped y a nosotros como idiotas viéndola, entonces recomiendo cerrar la ventan y mirar otra cosa. Por ejemplo: a una mujer blanca, embarrándose una sandía en su pecho desnudo. Ah! Sexo interracial!
Pero si tu pregunta es, ¡Ah chinga, qué pedo con esa pinche sandía? Bueno... disfruta este clásico del underground de los yunates. Ahí les dejo esto también:
Oh! Dem Watermelons
Esperen más recomendaciones cinematográficas pronto.
-Saludos peludianos-
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